Sigue la conversación Oriol Casabella, presidente la Asociación de Vecinos de la Barceloneta, sobre el turismo masivo en el barrio. Si te perdiste la primera parte, puedes leerla aquí.

[gdl_icon type=»icon-home» color=»#83aebd» size=»20px»]Si una persona decide alquilar su piso por semanas, a turistas responsables, gente que viene a cursos o a trabajar y además tiene licencia para hacerlo, ¿cuál es el problema? Si tiene licencia no se pude hacer nada. Lo que es legal es legal. Pero esto no es la habitual, los de la Barceloneta no estamos de la olla. A lo que decimos no es a los pisos turísticos. Pedimos que los ilegales los cierren y los legales que no cumplen, también.

[gdl_icon type=»icon-home» color=»#83aebd» size=»20px»]No acabo de entender que se vaya en contra de quienes tienen licencia. No vamos en contra, pero hay que entender que la Barceloneta es un barrio frágil: hay desahucios, gente que acaba yéndose de su barrio de toda la vida. Vemos cada piso turístico como especulación y como un piso menos para la gente del barrio. Es una amenaza. El turismo se tiene que dosificar y repartir. No puede ser que la Barceloneta o Ciutat Vella tengan que asumirlo todo. Que se reparta «la riqueza», si tan maravilloso es el turismo, que se reparta.

[gdl_icon type=»icon-home» color=»#83aebd» size=»20px»] Que un vecino pueda alquilar su casa, ¿no es repartir? ¿O sólo pueden sacar tajada hoteles como el W? Se supone que se repartía con la famosa tasa turística. Pero resulta que se la queda el Ayuntamiento para hacer más promoción del turismo, cuando debería ir al bienestar del vecino. Ya que lo sufrimos… Le pregunté a Mercé Homs, la regidora [y a su vez hermana de Francesc Homs] si se podía reinvertir la tasa turística y que el barrio puediera decidir en qué; pero su respuesta fue ‘que lo mirarían’.

Lo llamamos el Efecto Barceloneta, después de Can Vies. El alcalde tenía muy claro que volvería a ganar las elecciones, ahora ya no está tan claro[gdl_icon type=»icon-home» color=»#83aebd» size=»20px»]¿La solución no podría ser dar mas licencias? Si un vecino necesita pasta y ve la solución en el alquiler turístico, lo hará de todas maneras, pero si es legal es más fácil denunciarlo. Me mantengo en lo mismo. Esta protesta no es sólo de la Barceloneta, está en todos los barrios: Poble Sec, Gràcia… Hay que regular los pisos turísticos y dar las licencias en función de la densiad de población. Si en Barceloneta hay 15.000 vecinos, se hace una regla de tres y se ve a cuántas toca. Y hay otro tema: si lo que viene es gente para ir a un ‘congreso de tal’, que se vaya al hotelín. Porque para legalizar un piso la estancia mínima tiene que ser de 30 días. Si es así, fantástico, porque el que viene sabes que no te la a liar. Si etas tres días, al hotel. Se podría llegar incluso a una estancia mínima de una semana o 15 días, que es lo que se hace en muchos países de Europa.

[gdl_icon type=»icon-home» color=»#83aebd» size=»20px»]¿A cuánta gente representa la Asociación? A unos 200 vecinos. Este movimiento, la Plataforma Barcelona Diu Prou, se hace con los vecinos, es muy espontáneo. Nos conocemos todos. Pero quienes formamos parte de las asociaciones desde hace años somos los que hemos llevado el lideraje principal.

[gdl_icon type=»icon-home» color=»#83aebd» size=»20px»]¿Cómo fueron esos primeros días en que saltó la problemática de los pisos turísticos a los medios? Cuando saltó todo yo acababa de llegar de Asturias, y un vecino me dice ‘que está aquí tv3 y quiere hablar de los pisos turísticos’. Pensé, ‘ésta es la nuestra, es verano y no hay noticias’. Al de tve casi le hago un contrato, porque venía todos los días a las 7 de la mañana y me llamaba. Cuando aterricé, pensé que había que dar un paso más y hablar del modelo turístico; es el bombazo porque todo el mundo tiene algo que decir. Es la siguiente burbuja. Engloba muchos otros temas: hablamos de la locura del alquiler de bicis a guiris que parecen una mani de ecologistas, de las maquinitas (segways) que alquilan y es un desmadre que no esta controlao, de las terrazas, los ruidos, etc. Se puede hablar de tanto… y todo el mundo se siente identificado. El que no es por la bici es por la terraza que hace ruido, por el que le vomita en la calle, o el que se va de putas a Robadors. Vi en en este tema un pastelito. Y salí a la prensa porque nadie quería coger la alcachofa. Todo el mundo tenía un pánico a la tele espectacular. Cuando lo reventé con tv3 y el barrio empezó a parecer un plató de tv, la peña se animó. Lo llamamos el Efecto Barceloneta, después de Can Vies. El alcalde tenía muy claro que volvería a ganar las elecciones, ahora ya no está tan claro. Tiene fuegos en todos los barrios.