A ver si nos queda un planeta fértil siquiera después de nuestra mala racha agroalimentaria actual. Es, quizá, el único tema que podría competir con el hambre como “gran vergüenza del ser humano”. Curioso que vayan vinculados. Podemos combatir los dos, por eso, gracias a Restaurantes contra el Hambre y a participantes que respetan el planeta y su producto de calidad. Hasta el 15 de noviembre en Quinoa, Aguaribay, Casa Xica y Final Feliç (entre muchos más) podéis solicitar un plato solidario y el local dona parte de su precio –entre 0,50 y 2 euros– a Acción contra el Hambre.


Web: accioncontraelhambre.org/acciones/restaurantescontraelhambre