Fa poc més d’un any de la investigació sobre la Marina Port Vell i ara tornem a la costa. Aquest cop anem al darrere dels creuers i (alerta, spoiler!) no hi ha absolutament res de bo a dir sobre ells.

Hemos estudiado la ficha técnica del Harmony of the Seas, dado la vuelta al informe sobre la industria de los cruceros del Port de Barcelona, digerido el ensayo de David Foster Wallace Shipping Out – On the (nearly lethal) comforts of a luxury cruise, y sabemos lo suficiente sobre el concepto de hiperrealidad de Baudrillard como para deducir que estos barcos son una tragedia —tanto a nivel socio-cultural como a nivel ecológico. Cuando se lo preguntamos a Ada Colau, más metida en la Realpolitik ahora que cuando la entrevistamos hace un año, afirma que “hay que avanzar en mejoras medioambientales, porque, aunque los cruceros y el turismo son un activo para la ciudad, los grados de contaminación nos exigen actuar”.

Despite the fact that her answers and arguments are more party line nowadays, we can report back that the woman who governs this city is to be trusted. Interested in exchange of opinions and a sustainable and fair future, and hands on, she’s still the individual with integrity voted into power a year ago. Let’s watch her closely so she continues watching out for us, the 99%.

Have a happy PS. We’ll be over in L’H.

Puedes suscribirte y apoyar el periodismo local aquí, para que podamos seguir olisqueando a los cruceros y otros males y entrevistando alcaldesas. También puedes encontrar la revista gratis en nuestros puntos (y gracias a ellos).