From India to Barcelona

Tras los mexicanos, los italianos, los peruanos, los japoneses, los tailandeses… ahora les toca turno a los indios. Hablamos de restaurantes, claro.

En los últimos meses una oleada de establecimientos con sabores llegados de aquellas tierras en su versión adaptada al paladar nacional (entiéndase menos picantes y con productos autóctonos en la base) está tomando Barcelona. En su gran mayoría, ofrecen esta rica gastronomía en formato street food bueno, bonito, barato, rápido y algo gamberrillo.

Tomemos por ejemplo Super Naan. Un local pequeñito, de colorido ambiente kitsch-Bollywood que transporta ipso facto al cosmopolitismo moderno del país asiático. La carta tiene como eje gastronómico la India tradicional en una versión más saludable, con los naan como protas. ¿De qué va? Es el pan tradicional indio horneado en un horno tandoor —un cilindro de arcilla caliente— que tunean con diferentes ingredientes veggies o no, más o menos picantes. Los bowls son la otra especialidad.

Porque hay que ser cool, oiga. A tomar con un batido fresquito Lassi Mango (yogurt con mango), eficaz para calmar cualquier arrebato picante si es too much. El último secreto es que en la retaguardia está el Spice Room, una coctelería de autor cuyas creaciones llevan especias indias.

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